En Él se cumple la ley
Soy el pastor Eduardo Torres, este es nuestro quinto
encuentro y me siento agradecido a Dios por ti, espero que hoy Domingo te
encuentres bien, por aquí hoy un poco de lluvia, pero eso no impide que
adoremos a Dios en este día.
Ayer estudiamos sobre la Justicia de Dios y el pecado del
hombre. Hoy quiero comentarte que la
justicia de Dios tiene su total cumplimiento en Jesús, o sea que en Jesús se
cumple la ley de Dios. Nosotros no cumplimos la Ley de Dios y es por eso que el
Hijo viene en la persona de Cristo para tomar nuestro lugar ya que en Él se
cumple la ley Romanos 10:4 “porque el cumplimiento de la ley es
Cristo, para la justicia de todo aquel que cree”. Todos infringimos la ley, pero Jesús no. Puedes ver esto en Romanos 8:3, “por eso Dios envió a su propio Hijo en
condición semejante a nuestra condición de pecadores, para que se ofreciera en
sacrificio por el pecado.” Ahora el
Hijo encarna en el vientre de María y se conforma en el primogénito Hijo de
Dios, nacido de mujer como un perfecto hombre, pero a la vez siendo
perfectamente Dios, a esto se le llama “unión hipostática” y solo se cumple en
Jesús (100% humanidad y 100% Deidad).
Pablo expone esto en una forma aún más grande en Filipenses 2:5-11: “quien, siendo por naturaleza Dios, no
consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse” y así Él se
sacrificó por ti y por mí. Con su muerte
en la cruz satisface la ira de Dios, la cual debía recaer sobre el hombre por
haberse separado de Dios, pero la copa de la ira la bebió Jesucristo en la cruz,
en el calvario y es allí únicamente donde se consigue la salvación, es la
muerte de Cristo lo único que nos llevará a la eternidad con el Padre Celestial,
recuerda, sólo Jesucristo lo pudo hacer por ser el perfecto sacrificio por el
pecador, gracias a que la ira de Dios se manifestó en justicia, ya que Dios es
santo, es justo para con sus criaturas. Él te ama, te recibe y te perdona.
Mañana
completaremos esta reflexión con el evento que selló la victoria de la
redención, “La Resurrección de Jesucristo”
Bueno, seguimos
en oración y en victoria. Agradece al
SEÑOR por su poderosa palabra que nos alimenta en todo momento. Te sigo animando a conocer a Dios y yo te
ayudaré. Bendiciones.
Mañana
continuamos, Bendiciones, más quiero invitarle a la página "La Palabra de
Verdad" en Facebook